El actual presidente y Donald Trump ganaron las primarias de Georgia y Mississippi el martes WASHINGTON. El presidente Joe Biden aseguró el martes la nominación demócrata a la presidencia con victorias decisivas en Georgia y Mississippi, superando las preocupaciones sobre su liderazgo dentro de su propio partido mientras la carrera presidencial de 2024 se anunciaba como una venganza que muchos votantes no querían. Donald Trump también va camino de ganar la nominación de su partido.
El expresidente republicano, que enfrenta cuatro cargos penales, también ganó en Georgia y Mississippi, pero se mantuvo por debajo del umbral necesario para ganar la nominación republicana porque aún se estaban contando los votos recogidos en el estado de Washington y Hawaii. En general, el martes marcó un momento de cristalización para un país incómodo con sus opciones para 2024. No hay duda de que las elecciones generales de otoño serán una revancha entre dos presidentes imperfectos e impopulares.
Y es casi seguro que esta revancha –la primera entre dos presidentes de Estados Unidos desde 1912– corre el riesgo de profundizar las profundas divisiones políticas y culturales del país durante los próximos ocho meses. Antes de las primarias del martes, Trump reconoció que Biden sería el candidato demócrata, incluso cuando lanzó un nuevo ataque contra la edad del presidente.
