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La Semana Santa es un tiempo de reflexión, descanso y, para muchos, de viajes y actividades recreativas. No obstante, también es un período donde aumentan los accidentes de tránsito, los ahogamientos y las intoxicaciones alimentarias y por alcohol adulterado. Es crucial tomar medidas de prevención para garantizar la seguridad de todos.
Uno de los mayores peligros en Semana Santa son los accidentes de tránsito. Muchas personas se trasladan a playas, montañas y otras zonas turísticas, lo que genera un elevado flujo vehicular. Para reducir el riesgo de accidentes, es fundamental conducir con prudencia, respetar las normas de tránsito, evitar el consumo de alcohol si se va a conducir y verificar el estado del vehículo antes de viajar.
En lo que respecta a las actividades acuáticas, es importante recordar que los ahogamientos se incrementan en esta temporada. Se aconseja nadar en áreas supervisadas, no entrar al agua después de beber alcohol y vigilar a los niños constantemente. Adicionalmente, si no se sabe nadar, lo mejor es usar chaleco salvavidas.
Otro aspecto esencial es la alimentación. Durante la Semana Santa, se consumen muchos mariscos y pescados, por lo que se debe comprobar su frescura y conservación para prevenir intoxicaciones.
También es importante mantenerse hidratado y protegerse del sol con protector solar, ropa adecuada y sombreros.
Intoxicación por alcohol adulterado: En República Dominicana, el consumo de bebidas alcohólicas adulteradas con metanol ha provocado numerosos casos de intoxicación grave y muertes en los últimos años. Se aconseja adquirir alcohol solo en establecimientos de confianza, evitar bebidas de origen dudoso y estar atentos a síntomas como visión borrosa, vómitos y dolor de cabeza intenso, que pueden indicar intoxicación.
Es importante resaltar que con estas medidas, se puede disfrutar de una Semana Santa segura, evitando situaciones que pongan en riesgo la salud y la vida.
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