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El Gobierno talibán de Afganistán, que actualmente está en el poder, ha dado la orden a los medios de comunicación de eliminar u ocultar de Youtube aquellos videos publicados antes de su regreso al poder en agosto de 2021, y que puedan ser considerados contrarios a los valores islámicos y las tradiciones afganas.
“Se ha enviado una carta oficial de la Dirección de Publicaciones del Ministerio de Información y Cultura a los medios de comunicación para que se borre el contenido de los canales de YouTube que vaya en contra de las normas religiosas y culturales”, indicó a EFE el portavoz del Ministerio de Información y Cultura, Safiullah Rahid.
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La orden se centra en aquellos videos que se consideran contrarios al Islam y que fueron publicados antes de que los talibanes tomaran Kabul en agosto de 2021.
El objetivo de esta nueva medida, según se especifica en la carta enviada a los medios, es “evitar la visualización y redistribución de dicho contenido a través de ‘me gusta’, comentarios y otras interacciones de los usuarios en el ámbito virtual”.
Algunos de los medios de comunicación afganos más importantes, como Tolo News o Ariana News, todavía conservan este martes en sus canales de Youtube contenido publicado desde 2012, en su mayor parte noticiarios.
En muchos de ellos, no obstante, se observa a mujeres con el rostro descubierto ejerciendo como presentadoras, una práctica que ahora está prohibida bajo el régimen talibán.
El contenido afectado por esta directiva abarca más de una década de información archivada sobre Afganistán, incluidos numerosos atentados o ataques perpetrados por los talibanes durante el Gobierno de la República afgana.
La libertad de prensa se ha deteriorado de manera significativa desde la vuelta al poder de los talibanes. Cientos de medios de comunicación cerraron y un gran número de periodistas abandonaron el país por temor a las acciones de los fundamentalistas, quienes no han dejado de dificultar el trabajo de los periodistas desde entonces.
Una de las últimas restricciones es la que prohíbe la emisión de imágenes de seres vivos, lo que ha reducido notablemente el margen de actuación de los medios. A esto se añaden el arresto y las constantes amenazas contra periodistas.
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