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EE.UU.- Organizaciones en pro de los migrantes expresaron el jueves a EFE su malestar por la detención del jardinero hondureño, Dennis Guillen-Soliz, a manos de agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en un centro médico de Ontario, California, donde “ingresaron sin orden judicial y cubiertos”.
“No deberían entrar en esos lugares, sobre todo si es un sitio privado”, manifestó Yazmin Mercado, abogada de la organización Inland Coalition for Immigrant Justice (ICIJ), quien está en contacto con el hermano de Guillen-Soliz, alarmada por la detención dentro del centro de salud.
El operativo tuvo lugar el martes por la mañana dentro del Centro de Cirugía Avanzada de Ontario. Guillen-Soliz, de 30 años, buscó refugio allí tras ser sorprendido por agentes de ICE enmascarados mientras trabajaba cerca del edificio junto con otros dos compañeros, uno de los cuales “huyó y el otro, ciudadano estadounidense, no fue detenido”, explicó la abogada.
Un video del incidente circula en redes sociales, donde se ve a los empleados de la clínica pidiendo a los oficiales que liberen a Guillen-Soliz, quien se aferra al marco de una de las puertas del establecimiento, ya que habían invadido “una propiedad privada sin presentar ninguna orden de detención”.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) defendió el operativo asegurando en la red social X que los agentes portaban “chalecos antibalas claramente identificados” y que se trataba de una “operación dirigida” contra dos personas en situación migratoria irregular, en la que el personal médico “agredió” a los oficiales para impedir el arresto y llamó a la policía con una falsa denuncia de “secuestro”.
“No basta con que tengan los chalecos que dicen ‘ICE’, porque “hasta en Amazon se puede comprar un chaleco de ICE”, explicó Mercado con preocupación.
La abogada afirmó: “La comunidad está unida”, ya que los trabajadores del centro de salud solicitaron los nombres y las identificaciones de los agentes, quienes se negaron a revelar su identidad. También aseguró que la gente “tiene miedo de que estén secuestrando a personas”.
Después del tenso encuentro, el hermano de Guillen-Soliz pudo comunicarse con él, y la última información es que “será trasladado a la ciudad de Adelanto”, uno de los mayores centros de detención de inmigrantes en la Costa oeste de EE.UU., relató Mercado.
“Es muy difícil para su familia”, ya que perdieron a dos hermanos en un accidente automovilístico, y Guillen-Soliz había venido a EE.UU. para ayudar a pagar el tratamiento médico de su madre, que padece diálisis y diabetes en Honduras.
“Ahora estamos viendo cuándo podemos comunicarnos con Dennis, para tomar medidas legales e impedir su deportación”, dijo la abogada.
Sus familiares lo defienden asegurando: “Es una persona trabajadora y buena que solo trataba de ganar dinero para ayudar a su madre”.
Por el momento, los familiares abrieron un GoFundMe para cubrir los 10.000 dólares de costos legales, de los cuales hasta ahora han recaudado el 28%.
Esta no es la primera vez que los agentes de ICE, durante la Administración de Donald Trump, se niegan a identificarse durante los operativos, lo que desata críticas sobre los procedimientos éticos y legales por parte de organizaciones pro migrantes. EFE
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