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El mandatario Donald Trump afirmó en estos días que no tiene “nada que ver con Jeffrey Epstein” y que lo “expulsó” de Mar-a-Lago, su opulento club en Florida, puesto que era “un depravado enfermo”.
Tras resistirse bastante tiempo, se prevé que Donald Trump firme el miércoles una legislación que obliga al gobierno estadounidense a hacer públicos todos los expedientes sobre Jeffrey Epstein. No obstante, queda por ver si el presidente los divulgará en su totalidad.
El texto, avalado el martes por el Congreso, da un mes al Departamento de Justicia para revelar todos los archivos no secretos que obre sobre el financiero neoyorquino, fallecido en prisión en 2019 antes de ser juzgado por crímenes sexuales.
“Una vez que el presidente estampe su firma en el texto, deberá acatarlo y ejecutarlo con apego a la ley”, exhortó el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, quien alertó ante cualquier “artimaña por parte de Donald Trump”.
El deceso de Epstein en su celda ha nutrido incontables especulaciones, de acuerdo con las cuales el financista, muy conectado con la élite política, empresarial y del espectáculo, pudo haber sido asesinado para impedir que saliera a la luz información comprometedora.
En la contienda electoral del 2024, Trump prometió destapes importantes. Pero ahora incita a sus seguidores a dar carpetazo y afirma que todo es un “montaje” de la oposición demócrata.
Estos días repitió que no tiene “ninguna implicación con Jeffrey Epstein” y que lo “echó” de Mar-a-Lago, su suntuoso club en Florida, al considerarlo “un degenerado perverso”.
– “Sin nada que ocultar” –
Trump y Epstein, personalidades del círculo social acomodado de Nueva York, mantuvieron una relación cercana desde finales de los ochenta hasta que se distanciaron a inicios del nuevo milenio. Esto fue mucho antes de que comenzaran los procesos judiciales contra el financista, acusado de orquestar un entramado de abuso sexual de mujeres jóvenes.
El mandatario estadounidense, quien jamás fue imputado por la justicia en este asunto, se mostró en contra del proyecto de ley de “claridad en el caso Epstein”, e influyó sobre los congresistas republicanos que lo apoyaban.
El domingo, al hacerse patente que el texto sería aprobado, Trump manifestó su respaldo, si bien recalcó que los documentos del caso no deben “distraer la atención” de los “logros sin parangón” de su administración.
La propuesta fue aprobada el martes con 427 votos favorables y solo uno en contra en la Cámara de Representantes, y el Senado usó un procedimiento especial para darle luz verde sin discusión y por unanimidad.
Trump ahora debe sancionar la ley, dando inicio así al plazo de 30 días.
Los informes oficiales del caso Epstein abarcan también documentos relativos a su socia Ghislaine Maxwell, quien cumple una pena de 20 años de cárcel, y sobre todas las personas involucradas en los procedimientos legales conexos.
– “Cortina de humo” –
La semana pasada, Trump instruyó a su fiscal general, Pam Bondi, a iniciar una indagatoria sobre el vínculo entre el financista y ciertas figuras demócratas, entre ellos el expresidente Bill Clinton.
El Departamento de Justicia y la policía federal (FBI) habían comunicado en julio que “no habían encontrado evidencias para justificar una pesquisa contra individuos no procesados hasta ahora” en el caso.
Al ser consultada sobre el motivo de las nuevas averiguaciones, Bondi declaró el miércoles que estaban justificadas por “novedades”, sin especificar cuáles.
“Seguiremos brindando la máxima transparencia conforme a lo legal”, dijo a los reporteros.
La nueva normativa aprobada por el Congreso faculta al Departamento de Justicia a retener o censurar los documentos del caso bajo ciertas condiciones, principalmente para resguardar la intimidad de las víctimas o debido a “un examen federal o litigios en curso”.
El legislador republicano Thomas Massie, uno de los ideólogos del proyecto y constante opositor de Trump, manifestó su recelo de que estos sondeos sean “un velo” y un “intento de última hora para eludir la publicación del expediente Epstein”.
No obstante, subrayó el miércoles en X que, según las estipulaciones de la legislación, las autoridades solo podrían ampararse en la alegación de una investigación de forma “transitoria” y limitada.














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