Es penoso ver cómo el caudal del río Yaque del Norte se debilita cada vez más a su paso por Santiago. Todo lo que queda del caudaloso afluente es un arroyo inofensivo, y sólo los recuerdos dirán a los niños que alguna vez fue un poderoso y temible acuífero.
El vertido de basuras, sobre todo la vandalización de la cuenca, la extracción de materiales de construcción y la edificación de viviendas humanas tienen lugar sin que se apliquen las normativas municipales ni los controles de consecuencias adecuados, convirtiéndolo en una visible pocilga donde sólo los que tienen necesidades económicas utilizan sus aguas o pescan.
Antaño un atractivo para los turistas que visitaban el bulevar de Circumbaración Sur para contemplar los bellos paisajes de las inmediaciones de La Jolla, La Faye y Baracoa, lo que ahora se aprecia es una alarmante cantidad de desechos. Las aguas cristalinas son cosa del pasado y el río está desapareciendo.
El río, antes río, nos muestra una ciudad en ruinas. Esta realidad se agrava aún más a pesar de la larga búsqueda de recursos económicos por parte de diversos organismos.
El número de proyectos creados en nombre de esta causa para salvar Yake es asombroso.
Sin duda se han recaudado millones de dólares en su nombre, pero no sabemos adónde ha ido a parar el dinero. ¿Puede salvarse realmente Yake?
Parquímetros
Como un fantasma, ha resurgido el debate para salvar el sistema de regulación del aparcamiento en el casco histórico de la ciudad. Como de costumbre, las opiniones están divididas entre quienes tienen intereses financieros en el proyecto, los comerciantes y los representantes de diversas instituciones y asociaciones.
La cuestión se ha vuelto a plantear en la Cámara de Concejales. Éstos crearon una comisión para estudiar si debían volver a instalarse los parquímetros, pero el asunto se llevó al Tribunal Supremo, que dictaminó que su funcionamiento era inconstitucional por violar la Constitución y las leyes del país. Sin embargo, algunos sectores intentan anular lo que ya se ha decidido.
Debido al caos que reina en esta zona, la única salida que ven los distintos sectores es regular el aparcamiento, pero esto sería a costa del bolsillo de los contribuyentes. Ni los comerciantes ni las autoridades locales de esta zona quieren sus propios sacrificios económicos, sólo los de los propietarios de automóviles y los usuarios de los espacios públicos.
Senador del PRM.
No cabe duda de que el partido gobernante se está rascando la cabeza a la hora de presentar candidatos fuertes para las elecciones al Senado del Estado.
La lucha va a toda velocidad, con contiendas disputadas y nombramientos de candidatos.