El persistente flagelo de la violencia contra las mujeres motiva una constante movilización para erradicar este mal que azota a la sociedad.
Este sábado por la tarde se celebró una emotiva concentración en la ciudad colonial del Gran Santo Domingo para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Personas de todas las edades se reunieron en solidaridad para recordar a las víctimas, vistiendo camisetas con el lema «Juntos, vivamos y dejemos vivir una sociedad libre de violencia».
Se entonaron cánticos, se leyeron impactantes testimonios y se recordaron los nombres de las víctimas que habían dejado este mundo a causa de la violencia.
Se alzaron pancartas con lemas que pedían justicia, igualdad y respeto, y los mensajes de unidad y cambio resonaron por las calles adoquinadas.
Los encendidos discursos de activistas y líderes comunitarios recordaron a la gente la importancia de educar para la igualdad, fomentar el respeto mutuo y construir una sociedad más integradora.
Este acto en la Ciudad Colonial no fue sólo una manifestación, sino un poderoso recordatorio de que la lucha contra la violencia hacia las mujeres es responsabilidad de todos y cada uno de nosotros. La unidad y la acción colectiva son la clave para lograr un cambio real y duradero en esta lucha por un mundo más justo y seguro para todas las mujeres.
