Antes de la pandemia, 300 millones de personas en el mundo sufrían depresión, la principal causa de discapacidad.
Ante los retos que enfrenta el país para mejorar la calidad de la salud mental de la población, un grupo de expertos de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) trabajan de la mano de la inteligencia artificial y otras tecnologías para brindar asistencia en la salud mental de las personas.
Durante la celebración del I Foro Nacional de Salud e Inteligencia Artificial, Zoilo García, director de Investigación e Innovación de la PUCMM, habló sobre el trabajo que han realizado incorporando la inteligencia artificial y otras tecnologías para mejorar la salud mental de las personas.
García dirige el laboratorio de Emoción, Salud y Ciberpsicología en el campus de Santiago de los Caballeros, donde desarrolla aplicaciones que sirven como medidas preventivas para las personas expuestas a este padecimiento.
Al participar en un panel de Estrategias Locales, los investigadores dijeron que, para hablar de las creaciones que están llevando a cabo, necesitan destacar las emociones que ayudan a los humanos a motivarse, adaptarse y sobrevivir.
El miedo nos ayuda a alejarnos del peligro, la ira a enfrentarnos a alguien en una situación agresiva, la ansiedad a afrontar amenazas y la tristeza a recibir apoyo social cuando experimentamos una pérdida, explicó García.
García advirtió que, aunque estas emociones son esenciales para la vida humana, si son demasiado frecuentes o intensas, pueden pasar de normales a patológicas.
En estos casos, explica García, las enfermedades más prevalentes son los trastornos emocionales.
Estas enfermedades afectan a un gran número de personas, y en el caso de la República Dominicana antes de la pandemia del Covid 19, 4,7 de cada 100 dominicanos sufrían un trastorno depresivo. Sin embargo, en el caso de los trastornos de ansiedad, también un trastorno afectivo, la tasa es mucho mayor.
Antes de la epidemia de Covid19, 5,7 de cada 100 dominicanos sufrían un trastorno de ansiedad. El profesor García señaló que los trastornos de ansiedad no son enfermedades graves, pero afectan a la calidad de vida de quienes los padecen y en diferentes ámbitos.
Afirmó que antes de la pandemia había 300 millones de personas en todo el mundo que sufrían depresión, la principal causa de discapacidad, pero después de la pandemia la cifra había aumentado en 56 millones.
En cuanto a la ansiedad, 260 millones de personas la padecían durante la pandemia, pero esta cifra aumentó a 76 millones después de la pandemia.
Señaló que este problema no sólo afecta a la persona afectada por la enfermedad, sino también al coste de la medicación ambulatoria, y añadió que las compañías de seguros no suelen cubrir este tipo de enfermedades en el país.
El experto consideró que en el país se estigmatiza a las personas con trastornos emocionales porque son reacias o tímidas a buscar terapia, y el costo de la atención en salud mental es alto.
Según el Sr. García, es ventajoso contar con un gran número de psicólogos en el país, ya que la psicología es una de las profesiones más estudiadas.
Los ponentes señalaron que el 55% de la población de los países desarrollados carece de acceso a la atención psicológica, frente al 85% de los países en desarrollo, como la República Dominicana.
Ciberpsicología
Tras señalar que el mundo se encuentra en una situación precaria en el abordaje de la salud mental, Zoilo García consideró que la ciberpsicología podría contribuir significativamente a la prevención y apoyo de las personas con trastornos emocionales. La ciberpsicología trata de cómo la tecnología de la información y la comunicación puede repercutir en la salud mental, y podría decirse que puede influir en distintos ámbitos para mejorar los servicios sanitarios.
En el Laboratorio de Emoción, Salud y Ciberpsicología, un grupo de tecnólogos diseña plataformas y aplicaciones para mejorar la ansiedad de las personas y las prueba empíricamente a través de un proceso de investigación.
Hemos llevado a un pequeño laboratorio a ser líder en el desarrollo de aplicaciones validadas y publicaciones en la ciudad de Santiago, dicen los psicólogos.
Inteligencia artificial y salud mental
García presentó un proyecto que podrá ayudar a las personas a afrontar el estrés, la ansiedad y el duelo con la ayuda de la inteligencia artificial.
Para ello, se pondrá en marcha una aplicación de prevención consistente en un chatbot basado en inteligencia artificial.
Actualmente estamos trabajando en un mapa de toma de decisiones que incorpore los últimos protocolos de tratamiento para diversos trastornos depresivos y de ansiedad», explicó García.
Según García, el bot de conversación servirá como medida preventiva para intentar mejorar el estado de ánimo de las personas, e incluirá psicoeducación sobre la ansiedad, monitorización del estado de ánimo, técnicas de reestructuración cognitiva, relajación y ejercicios de respiración.
Se trata de una aplicación de bajo coste que se puede utilizar desde dispositivos móviles como medida preventiva para evitar el desarrollo de trastornos emocionales.
Señaló que actualmente existen más de 40 ChatBots conversacionales para salud mental, pero ninguno para Latinoamérica y ninguno que incorpore los tratamientos de ansiedad, depresión y estrés en los que estamos trabajando actualmente.
También se están utilizando otras tecnologías para apoyar a las personas con trastornos emocionales, como la realidad virtual y la realidad aumentada (RA).
García presentó My Virtual Peace, una aplicación que incorpora realidad virtual e inteligencia artificial. Surgió a raíz de la pandemia, cuando las personas que perdieron a familiares en Covid 19 no pudieron hacer el duelo debido a limitaciones sanitarias.
My Virtual Peace es una aplicación gratuita que incorpora escenarios virtuales con tareas basadas en protocolos ya validados para ayudar a la persona en su duelo.
‘Podemos incorporarlo a escenarios como una playa al atardecer y expresar el duelo desde un duelo disfuncional a un duelo funcional’, explicó la panelista sobre la funcionalidad de la aplicación.
Otra plataforma es la de inducción de estados emocionales positivos (INDEEP), actualmente en fase de prueba. A través de esta aplicación, las personas con síntomas depresivos pueden interactuar en un mundo donde hay diferentes actividades que se ha demostrado empíricamente que ayudan a mejorar el estado de ánimo.
Según García, INDEEP utiliza extractos de canciones que han demostrado en estudios mejorar el estado de ánimo de las personas a través de ejercicios de relajación.