Carmen Beatriz Betance Espinosa, 49 años, piel clara, cabello castaño claro hasta los hombros, alta e inteligente. Le encantaba leer y disfrutaba de las actividades religiosas y familiares. Es médico de profesión.
En su entrevista con Hoy dijo que ser madre es su mayor lucha, pues tiene que proteger su maternidad por su profesión, pero sin duda Carmen recuerda, sus hijos fueron el regalo más grande que Dios le había dado.
Sin embargo, no todo tenía que ser color de rosa, aunque nunca lo fue, recuerda Carmen, y para esta madre, uno de los momentos más duros que vivió. Lo que vivió fue cuando a uno de sus hijos le diagnosticaron cáncer en el ojo izquierdo.
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. “Experimentar esto me ha empoderado y motivado a seguir adelante y aprender de los fracasos”, dijo Betance Espinosa, quien mencionó haber pasado por este proceso en un momento en que su esposo estaba desempleado. un poco más de su vida
Al Cuando Betance habló de su infancia, suspiró al recordar lo maravilloso que era conocer bao, como lo describió, porque cuando creció tuvo padres y vivió en un familia con cuatro hermanos y hermanas. Donde sus padres trabajaron mucho y sus abuelos siempre se preocuparon por ellos.
Provenía de una familia de escasos recursos, pero la felicidad y la solidaridad, que la motivaron, la empujaron a ser ella misma. Hablaba con emoción de las cosas que hacía cuando era niña, como jugar a la mancha, sentarse en la acera cuando la casa no tenía electricidad y mirar las estrellas.
Para Carmen, estos recuerdos dejaron una huella. dentro de ella. . infancia, porque se basa en el amor. Además, reveló que vino desde Barahona a la capital para estudiar medicina, pero no fue un camino fácil, pues durante sus estudios tuvo que trabajar como cajera en una tienda y bordar vestidos, debido a que una vecina produce piezas en grandes cantidades. . para distribuir a las tiendas, por lo que la ayudaron ella y su hermana que la acompañó en este viaje.
Más tarde se especializó en medicina familiar y comunitaria, contando con tristeza las veces que lo intentó. para obtener la especialidad, compitiendo tantas veces que dijo que no lo logró debido a la falta de conexiones o ventajas que podrían haberla ayudado a lograrlo en ese momento.
Apoyo de la comunidad cristiana
Carmen cuenta entre sus éxitos estos: ser parte de una comunidad cristiana donde conoció a Dios, se formó como médico y tuvo un matrimonio cristiano. “Mi mejor y mayor logro es ser parte de una comunidad cristiana porque conocí a Cristo”, dijo Betance.
