Cádiz (1973) Escritor y editor especializado en tecnología. Llevo escribiendo profesionalmente desde 2017 para medios y blogs españoles.
Ahora que la plataforma Bluesky está creciendo con fuerza, recuerdo que tengo una cuenta activa allí y no le presto mucha atención. . Ayer decidí iniciar sesión y de hecho vi que algunas de las cuentas que vi en X también aparecieron allí. Pero hoy tengo una sensación ligeramente diferente y realmente no es muy agradable.
Durante meses, mi cuenta Bluesky ha estado inactiva. Lo veo como una opción más en el mundo de las redes sociales. Ahora que se está volviendo muy actual, volví y miré a mi alrededor y me sentí afortunado de que hubiera tanto contenido en español. Sí, me recuerda mucho al Twitter de hace 10 años o más. Ayer domingo noté que algo no me agradaba y ahora veo que toda la situación sigue igual.
Admito que el sentimiento es bastante confuso. Y para mi gran sorpresa y decepción, muchas de las cuentas que había bloqueado en Y lo peor es copiar exactamente el comportamiento que ha producido los mismos argumentos explosivos, las mismas tácticas polarizadoras, el mismo deseo de convertir cada conversación en un campo de batalla política. Todo esto está empezando a contaminar la dieta de Bluesky, amenazando con convertirlo en el peor clon de X.
Esta experiencia me hace preguntarme si ¿Es realmente posible escapar de la polarización y toxicidad de X? mundo social. red. ¿Es esto un problema de plataforma o de usuario? ¿Puede una red social permanecer neutral cuando sus usuarios plantean sus batallas ideológicas? ¿No es Elon Musk tan pecaminoso y malvado como lo retratan?
Bluesky ahora enfrenta un desafío importante. ¿Podrá cumplir su promesa de un espacio digital más saludable? ¿Puede aplicar mecanismos de moderación eficaces para evitar la difusión de contenidos nocivos sin censura? Las respuestas a estas preguntas determinarán si Bluesky realmente puede ofrecer una alternativa a largo plazo o si simplemente se convertirá en otro campo de batalla digital.
Mi experiencia me ha enseñado que la calidad de una red social no sólo depende de su diseño o de sus políticas, sino también de cómo decidimos utilizarlo. Como usuarios, tenemos la responsabilidad de crear el tipo de entorno digital en el que queremos participar. Quizás en lugar de buscar constantemente nuevas plataformas, deberíamos pensar en cómo podemos ayudar a hacer de cualquier espacio digital un lugar más constructivo y menos tóxico.
Mientras tanto, continuaré monitoreando cómo se desarrolla Bluesky. , con la esperanza de que puedas resistir la marea tóxica y mantenerte fiel a tu visión original. Sólo el tiempo dirá si este nuevo cielo se mantendrá azul o se nublará con tormentas como hemos visto en otras plataformas.